Los problemas de salud mental comunes en el período posparto son la depresión y la ansiedad.
Es muy importante atender sistemáticamente la salud mental y el bienestar social de la madre. Las intervenciones psicosociales deben formar parte de cada consulta posnatal, junto con la derivación a un profesional calificado para atender las afecciones que requieren un apoyo más intensivo, a través de estrategias como la psicoeducación, la terapia cognitivo-conductual y la psicoterapia interpersonal.
Los servicios de atención postnatal y de la primera infancia son vías importantes para proporcionar intervenciones destinadas a la prevención y el tratamiento de los problemas de salud mental maternos. Además, en estas intervenciones debe incluirse también al padre, la pareja o el cuidador, con objeto de abordar los factores de riesgo que afectan la salud materna e infantil, como la violencia o la falta de participación del padre en el cuidado del niño o la niña.
