La responsabilidad fundamental de vigilar la aplicación del Código Internacional de Comercialización Sucedáneos de la Leche Humana recae en los gobiernos.
La vigilancia es más eficaz cuando esta responsabilidad se reparte entre los principales organismos gubernamentales implicados en las diferentes fases de comercialización de los productos.
- En la legislación nacional sobre el Código se debe indicar qué organismos gubernamentales realizan la vigilancia y cómo debe ser llevada a cabo.
- Los fabricantes y distribuidores de sucedáneos de la leche humana deben someter a vigilancia sus propias prácticas de comercialización en todos los niveles.
- Quienes gestionan instituciones y quienes integran los equipos de la salud deben vigilar las prácticas de los centros de atención para asegurar que no se comercializan productos en sus instalaciones.
- Las organizaciones no gubernamentales, las instituciones y los particulares pueden llamar la atención de los fabricantes y distribuidores sobre las actividades que son incompatibles con el Código e informar a sus gobiernos para que se puedan tomar medidas.
